Evan y Clovis eran dos hermanos enanos. Los hermanos Willrow. Su maxima meta era formar parte de la Gran Guardia de Thorbadin, entrar a la milicia, ser guerreros de honor. Desde pequeños dejaron su hogar para estudiar en la escuela militar de Telerión. No eran de los mejores alumnos pero ese era su sueño. Sacrificar su niñez para ser un honorable guerrero de adulto.
Una vez graduados de su escuela militar. Empezaron a deambular por el mundo para juntar proezas y así ser aceptados en Thorbadin. No les fue bien en el primer torneo, nunca fueron privilegiados mas bien del montón pero muy persistentes, eso no se puede negarJ
Evan siempre fue el lider, más su hermano menor Clovis era el más fuerte y a la vez el mas alegre. Evan debía esforzarse más para entrenar lo que su hermano hacía con facilidad. Lo que le formo un carácter mas serio, pero a la vez tuvo que ser mas constante y responsable. La vida de Clovis era mas fácil. Un día se toparon en el torneo con un gran guerrero, el más grande que ellos habían visto. Ese guerrero era un humano de una orden que nunca habían escuchado, pero su resplandeciente armadura parecía decir lo poderoza de aquella orden. Serán así de resplandecientes las armaduras de Thorbadín?? No lo sabían pues solo lo habían escuchado en los cuentos de su niñez, más ese era su sueño.
El combate fue despiadado. Era un combate de honor, debían embestir y dañar lo mas posible al enemigo. Rearmarse y volver a atacar.....
Así lo hicieron nueve veces fueron al ataque y las nueve veces fueron pateados y maltratados como nunca lo habían sentido. Fue una paliza terrible. Cuando se levantaron de la novena pelea, sus piernas no los podían sostener. No podían blandir sus espadas, no podían seguir peleando. No debían seguir peleando. El caballero de la armadura reluciente se sacó su casco. Y mostró su cara humana con una sonrisa de desprecio. Los miró y les dio una vuelta. Mientras Evan y Clovis trataban de cubrise a medida que el poderoso oponente giraba mirándolos. No pudieron mantenerse de pie.....y cayeron.
-Ja ja ja ja ja. DÉBILES!......No merecen que los mate.....No merecen que los aplaste como insectos que son. Púdranse, como como la mierda al lado del camino....
Evan y Clovis cayeron, y por primera vez.....lloraron de impotencia. Lloraron su derrota. Sintieron el fracazo.....ya no valían nada. Nada. Nunca entrarían a Thorbadin.
La gente se fue y ahí quedaron malheridos y muy malheridos.....y con la esperanza perdida....
Los enanos miraron con odio. Su mirada rojiza y húmeda quemaba. Realmente les extraño ver a un hobbit regordete mirándolos con alegría en los ojos. O los miraban con desprecio?. El hobbit estaba realmente cagado de la risa mirando a los dos enanos llorando.
El primero en reir fue Clovis. Empezó de a poco. Entre risa y llanto, pero la risa de hobbit era bastante contagiosa, era como la risa de un niño. Era una risa pura.
Y una gran guerra de agua hicieron . Pero ya rieron todos, y todos fueron iguales, igualmente mojados y humillados. Pero iguales. No se sintieron solos, sino compañeros.
Buscaron a ese caballero toda la noche...y todo el día siguiente. Y la verdad lo siguen buscando, no son caballeros, no tienen honor....mas bien son forajidos.....Forajidos Willrow, así les dicen.....