Primera
aparición de la Santísima Virgen (Colectiva
para el grupo de las hermanas y familia Padrón) Llegó
así el día 6
de febrero de 1993,
sábado En
la tarde la familia Padrón acudió a la residencia religiosa de las
Siervas de Jesús, porque el día anterior, viernes, tal como correspondía,
al Ing. Padrón le había resultado materialmente imposible venir a la
adoración y manifestó que deseaban hacerla en este día sábado, para
no perder el ritmo semanal. Cuenta
el Ing. Padrón, que ese día toda la familia había sentido la
necesidad de ir a orar como siempre y por tanto no tuvieron empacho
alguno en pedir el permiso para acudir ese sábado, en sustitución de
la falta del viernes La
hermana Clara les concedió la autorización sin problema alguno. Como
todavía era temprano y mientras llegaba el momento del inicio de la
hora santa, se detuvieron a conversar un tanto. La hermana Mary Carmen
pensó dentro de sí algo molesta' -"
Esta familia viene siempre a quitarle el tiempo a uno
"- Durante
la hora santa el Ing. Padrón observó que la imagen del Sagrado Corazón
de Jesús de la capillita resplandecía en forma extraña, rodeada de
una especie de color azul celeste; a esto se añadía olor a incienso,
rosas y nardos, en ese orden. A un cierto momento comenzó a sudar
mucho, a pesar de la temperatura, que en este mes del año es
particularmente baja y de pronto escuchó (y no sabe explicar cómo) una
voz suave y tierna de mujer que decía: “
SOY MARIA, LA MADRE DE DIOS, LA MADRE DE ESTAS HIJAS TAN QUERIDAS Y LA
MADRE DE TODOS. HE VENIDO AQUÍ, A ESTE BOSQUECITO, A ESTE JARDIN, A
ESTA CASA DE RECOGIMIENTO Y DE ORACION, DONDE ESTÁ MI HIJO MUY AMADO.
ESTA NOCHE ESTARE CON USTEDES, TODOS PODRAN VERME, LES ACOMPAÑARÉ TODA
LA NOCHE Y ME MANIFESTARE HASTA EL AMANECER. HIJITAS MUY QUERIDAS: ALEGRENSE
EN EL SEÑOR YA QUE LOS PRODIGIOS DE MI HIJO JESUS LAS RODEARAN, EL SEÑOR
HA ELEGIDO LAS MAS PEQUEÑAS Y ASI RECIBIRAN MIS MENSAJES MIS HIJOS E
HIJAS CONSAGRADAS EN TODO EL MUNDO “ Mientras
escuchaba las palabras el Ing. Padrón las repetía en voz alta como
efecto de un imperativo que no sabia explicarse. La cara de sorpresa de
su esposa e hijos era tal que al finalizar la hora santa y mientras las
hermanas se dirigían hacia la cocina por el corredor, la esposa le
reclamó entre sorprendida y molesta la razón de tal despropósito. "¿Por
qué dijiste esas cósase Le dijo al esposo con evidente molestia. A lo
que respondió el Ing. Padrón: "Quédate
tranquila y esperemos". No
obstante él mismo se preguntaba a sí mismo qué es lo que había
ocurrido y su desconcierto era aún mayor que el de ellos. Pero a pesar
de todo sentía simultáneamente una gran segundad. Hacia
las 6:10
p.m., los Padrón dieron inicio al ensayo de cánticos a la Virgen
acompañados del teclado. Se habían colocado alrededor de un mesón que
estaba en el pasillo corredor cerca de la cocina. Desde allí se podía
visualizar perfectamente la explanada jardín de la casa religiosa. Unos
minutos más tarde, una ingente bandada de pájaros se posó en las
ramas de los árboles más cercanos del bosque y se pusieron a trinar en
un tono muy intenso; y era tanto el alboroto que los que ensayaban
dejaron de cantar y al instante los pájaros suspendieron sus trinos. Se
repitió vanas veces hasta que decidieron no tomarlos en cuenta. Entonces
la familia Padrón invitó a las hermanas, que estaban en el recinto de
la cocina a unos pasos, para que participaran en el ensayo y ellas
aceptaron gustosas. Además de la superiora hermana Clara, se hizo
presente la hermana Clara, una de las dos jóvenes Por razones de un
viaje a la ciudad de Valencia la hermana Consuelo, que pertenecía al
grupo de las dos de más edad junto con la superiora, no estaba presente
ese día. La
hermana Mary Carmen se había apartado del grupo, después de terminada
la hora santa, presa de un cierto desagrado; por lo cual no estaba
presente con las demás hermanas cuando se sumaron al coro de los Padrón. Ya
cerca de las 7:00
p.m., la hermana Clara pidió que llamaran a la hermana Mary Carmen para
que las acompañara en el ensayo de estas bellas canciones para la Santísima
Virgen, aprovechando que el Ing. Padrón había traído el teclado. Ella
por supuesto obedeció prontamente pero dentro de sí continuaba
sintiendo que le resultaba un tanto incómodo y desagradable estar ahí.
La usurpación que esta familia había hecho del tiempo de las hermanas
no era de su agrado. De
canción en canción el tiempo caminó lentamente hasta las
7-30
p.m., aproximadamente. A
esa hora de las 7:30
el Ing. Padrón, que estaba de frente al jardín, porque todos los demás
se habían colocado sentadas y de espaldas, como cuando un director
dirige un coro, pudo notar una luz azulada, similar a la que emite un
flash de cámara fotográfica. Esa luz duró alrededor de
20
segundos y luego apareció una imagen de la Santísima Virgen, muy
similar a la de Fátima. Era una imagen viva por el movimiento ondulado
del manto y de la túnica al paso del viento suave. Como
los presentes estaban de espaldas no observaron nada. Así que el Ing.
Padrón, como reponiéndose de la sorpresa y sin saber como reaccionar,
les dirigió a todos estas palabras: "¿Qué
harían ustedes si se presentara la Virgen en este lugar?". Las
hermanas y los integrantes de la familia del Ing. Padrón se sonrieron
con cierto aire de desconcierto por lo extemporáneo e intempestivo de
la pregunta Pero ante la insinuación de que voltearan y vieran, todos
volvieron el torso y fueron capaces de admirar la manifestación de la
Santísima Virgen. Estaba
majestuosamente colocada cerca de un caminito hacia el bosque, que
entonces tenía una baranda verde de madera La Virgen estaba de pie y a
unos dos metros de altura del suelo, sobre una mata de cambur De
inmediato todos se levantaron y quedaron mirando fijamente hacia donde
se manifestaba la Santísima Virgen. Luego caminaron en grupo hasta el
primer rosal en dirección hacia la aparición. La
hermana Mary Carmen exclamó al llegar a este punto "¡Madre mía!”
pensando dentro de sí misma que realmente se trataba de la Santísima
Virgen, pero al instante la avasalló una duda muy intensa acerca de la
realidad de lo que estaba contemplando Al querer avanzar escuchó una
voz firme que le ordenaba- "
¡ no vayas ¡
". El
Ing. Padrón oyó proferir luego a la hermana Mary Carmen una exclamación
extraña: "¡Déjame¡
"
como si ella tratara de quitarse de encima o de apartar de su lado algo
molesto o dañino Y la hermana Mary Carmen, como un efecto de lo que
estaba ocurriendo tanto fuera como
dentro de sí misma cayó sin conocimiento exactamente sobre el rosal. Al
instante las hermanas y la familia Padrón se apresuraron a auxiliarla.
Pero la que estaba más cerca era la señora Marlene de Padrón y en
consecuencia tuvo la oportunidad de recogerla y colocarla sobre sus
piernas El desvanecimiento duró
8
minutos. En vista de que el desvanecimiento se estaba alargando excesivamente
el Ing. Padrón preguntó a la superiora hermana Clara dónde se podría
localizar un médico, pero casi de inmediato la hermana Mary Carmen
recobró el conocimiento y acto seguido, sin pensarlo dos veces, se puso
de rodillas con las manos juntas a nivel del pecho. Es
preciso observar que mientras la hermana Mary Carmen estaba fuera de sí,
interiormente se vio avasallada por una tremenda lucha interior consigo
misma Cuenta ella que la batalla estribaba en que por un lado sentía
una poderosa inclinación a no creer en nada de lo que estaba ocurriendo
y por otro deseaba salir corriendo y desaparecer del lugar Cuando
recobró la plena conciencia de sí misma se dio cuenta que estaba de
rodillas y que la Santísima Virgen le estaba transmitiendo una gran paz
interior, habiendo desaparecido la lucha interna acerca de la realidad
de lo que estaba pasando. La
Santísima Virgen inició entonces una conversación con la Hermana
Mary Carmen Las demás hermanas y los miembros de la familia Padrón sólo
observaban los movimientos de labios, de manera alternada, tanto de la
Santísima Virgen como los de la hermana Mary Carmen, sin escuchar
absolutamente nada. La
Santísima Virgen se dignó, pues, entablar el diálogo exclusivamente
con la hermana Mary Carmen y le transmitió mensajes y palabras íntimas
que estaban destinadas únicamente a ella. Pero más tarde le indicó
que le iba a entregar un mensaje, el primero de todos, que estaría
dirigido a sus hermanas de la Congregación de las Siervas de Jesús. Mientras
la hermana Mary Carmen dialogaba con la Santísima Virgen pudo
observarse que su hábito se transformaba en algo brillante por efecto
de una iluminación particular que no se sabía de qué manera ocurría.
Al terminar el diálogo privado entre la Santísima Virgen y la
hermana, ésta, en voz audible, les indicó a todos los demás
presentes: "La
Santísima Virgen pide que se arrodillen) Todos
obedecieron y se arrodillaron sobre la grama Decidieron rezar el santo
rosario, de rodillas ante la Virgen que estaba ante sus ojos.
En cada misterio se indicaba una intención particular. Antes del
segundo misterio la hermana Mary Carmen expuso la intención "Por
los Sacerdotes y por las Religiosas" Mientras hacia mención de la
intención del misterio la Santísima Virgen giró la cabeza con un
movimiento suave, con rostro sonriente, bajó sus brazos, los abrió,
hizo una reverencia con el cuerpo y luego se reincorporó a la posición
previa. Al
cuarto misterio el Ing. Padrón sugirió a la hermana Mary Carmen que
repitiese la intención por los sacerdotes y religiosas y aquí la Santísima
Virgen repitió las acciones y gestos de reverencia del segundo
misterio, pero como dando las gracias. Durante
el rezo del santo rosario ocurrió un fenómeno que les llamó mucho
la atención: desde el manto de la Santísima Virgen se desprendió una
luz muy brillante, algo así como una estrella que cayó al suelo y se
partió en infinidad de trozos minúsculos, como escarchas Este
primer mensaje recibido en esta oportunidad por la hermana Mary Carmen
de la Santísima Virgen es como sigue:
Cuenta
la hermana Mary Carmen que después de haberle dictado el mensaje la
misma Santísima Virgen se dignó aconsejarla con relación a una
pregunta que le harían posteriormente muchas personas' "¿Como
viste a la Virgen? ¿ Cómo era ella?" La
Santísima Virgen le sugirió que respondiese de esta manera' "
La vi con un traje azul y blanco muy hermoso y no tengo palabras para
describir su hermosura, no hay nadie en el mundo como Ella
" La
hermana Mary Carmen escribe esto en sus apuntes "Sí, la vi Y este
mensaje es de ella Quien mega al hijo mega a la madre Quien mega a su
madre, mega al hijo" Después
del mensaje la Santísima Virgen pidió a los que estaban junto a Mary
Carmen que se arrodillaran una vez más, porque los quería bendecir. Al
terminar la bendición la hermana interlocutora se levantó y se dirigió
a la capilla sin dirigir la mirada a nadie Transcurrido
un corto espacio de tiempo regresó al mismo lugar anterior y se quedó
embelesada, admirando el manto blanco y resplandeciente, todo iluminado,
del cual caían estrellas al suelo, mientras la mirada de la Santísima
Virgen se dirigía tanto hacia el cielo como hacia la capillita donde
estaba el sagrario La Virgen tenia a su lado una corona de flores. Hacia
medianoche la Santísima Virgen todavía estaba presente mientras las
hermanas y los demás continuaban orando y como embelesados por la
Santísima Virgen La
hermana Clara, superiora, tocó entonces una campanita y pidió a todos
que se dirigieran hacia el comedor para hacer una cena frugal, no fuera
que alguno se mareara, ya que desde el almuerzo no habían probado
bocado. La
hermana Mary Carmen le contestó a la superiora que realmente no tenia
ningún apetito y por esa razón se abstuvo de acompañar al resto que
se dirigió al comedor con la superiora Entonces la Santísima Virgen
tuvo la gentileza de reprenderla mediante una acción adoctrinadora. La
Virgencita dio media vuelta y se colocó de espaldas De esta manera
parecía demostrar su desagrado por la decisión errada de la hermana
Mary Carmen. Y ésta entendió el mensaje: la voz de la obediencia es la
voz de Dios, así que se apresuró a caminar hacia el comedor. Por
supuesto la comida no le pasaba, tanto que se sentía ahogada, tratando
por cierto de ayudarse en la tarea con sorbos de agua. Terminada
la cena regresaron todos, incluida la hermana Mary Carmen. La Virgen había
retomado ya a la disposición primera, es decir estaba una vez más
mirando de frente. El
Ing. Padrón en este momento, después de orar un poco sintió para sus
adentros que su permanencia y la de su familia en este santo lugar tenía
que darse por terminada, porque intuía que la aparición estaba
destinada a las religiosas, ya era muy tarde y se trataba además de una
casa religiosa. Así que con la familia entera se retiró del lugar no
sin pesar por tener que obrar de esta manera. Hacia
la una de la madrugada la superiora, hermana Clara, consideró oportuno
ordenar a las otras dos religiosas, hermana Clara y hermana Mary Carmen
que fueran a dormir y descansar a sus respectivos cuartos. La hermana
Mary Carmen pensó que hubiera sido mejor quedarse allí toda la noche,
pero la orden de la superiora exigía obediencia y recordó la
amonestación de la Virgen cuando lo de la cena. Así que se retiró con
gran pesar. Se despidió de Jesús en el Sagrado como siempre lo hacia
acercándose a la capillita y le dio las gracias por haberles concedido
el gran don de haber enviado a su Santa Madre. Cuando
la hermana Mary Carmen llegó a su cuarto se vio sorprendida por un gratísimo
olor a esencia de rosas que impregnaba toda la habitación. Llena de júbilo
y de agradecimiento no pudo menos que exclamar: "Gracias, madrecita
querida. Estás aquí.
"
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