Recuerdas
ayer que éramos dos,
Dos soles dispuestos a prestarnos brillo,
Pero a la hora del brillo mutuo,
Llegó la noche y nos envolvió.
Recuerda que por dos bellos días,
Hay un par de horribles noches,
Y no tengo nada contra la oscuridad,
Solo sé que me alejo de ti.
Pero ahora dime ¿Qué puedo hacer?
Si la noche y mi arrojo te apartaron de mí,
No ha sido mas que un simple impulso,
Pero recuerda, que si la tierra se detiene...
Nosotros salimos volando.
Ayer lloré como nunca y no se por qué,
Solo se que perdí como de costumbre,
Y no perdí un estúpido juego,
Perdí a alguien a quien ahora le ruego.