Estoy perdiendo
cordura,
Pues en todos lados te veo,
No se si un día volverás,
Pero yo aquí te espero.
Esas cosas las dices o las escuchas,
Y hay que aprender a hacerles caso,
Pues es el alba y luz perpetua,
Si te niegas puede ser mi gran ocaso.
No todo lo que brilla es oro,
Mi amor de oro no es, te juro,
Es de fuego, tu lo dices,
Pero el fuego se consume...