Antonio Guzmán Blanco |
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Prof: Mariana Córdova |
Participante: Alexandra Ramírez / C.I. 12.383.107 |
Antonio Guzmán Blanco (1829-1899),
militar y político venezolano, presidente de la República (1870-1877;
1879-1884; 1886-1887). Nació en Caracas el 28 de febrero de 1829. Se graduó como abogado en la Universidad
de Caracas (14 de abril de 1856) y al año siguiente pasó a ser cónsul en las
ciudades estadounidenses de Filadelfia (julio) y de Nueva York (octubre).
Regresó al país en 1858, pero el presidente Julián Castro lo expulsó a las
Antillas (8 de enero de 1859), donde se sumó a la revolución de Juan
Crisóstomo Falcón y Ezequiel Zamora. Guzmán desembarcó con Falcón en
Palmasola (24 de julio de 1859) y se convirtió en figura clave de la
federación, desempeñando varios ministerios, delegaciones diplomáticas y la
vicepresidencia de la República. Tras el retorno de José Tadeo Monagas al
poder, Guzmán inició en Curaçao su propia revolución y desembarcó en
Curamichate el 14 de febrero de 1870. Una campaña fulgurante lo llevó hasta
Caracas (27 de abril). Fue presidente provisional hasta que empezó el periodo
constitucional (20 de febrero de 1873) que culminó el 20 de febrero de 1877
(este primer mandato de Guzmán pasó a conocerse como 'el Septenio'). El
Congreso le confirió el título de 'ilustre Americano, regenerador de
Venezuela'. Al triunfar la denominada 'Revolución
Reivindicadora', regresó desde París y asumió la Dirección Suprema (25 de
febrero de 1879). De presidente provisional (27 de abril), pasó a ser
presidente constitucional por un periodo de dos años. Reelegido por dos años
más, gobernó hasta el 27 de marzo de 1884 (periodo conocido como el
'Quinquenio'). El tercer periodo de Guzmán,
denominado de 'la Aclamación' (1886-1888), no concluyó, ya que Guzmán,
hastiado de gobernar, marchó nuevamente a París (8 de agosto de 1887). Entre los logros de Guzmán Blanco se
encuentra:
Antonio Guzmán Blanco constituye la
personalidad política de mayor relieve en la segunda mitad del siglo XIX. Su
retiro puso fin al más extenso y dinámico período de desarrollo y de cambio en
la historia de Venezuela durante ese siglo. En apenas 2 décadas había
reorientado la evolución política y económica del país, para lo cual utilizó
como un instrumento su alianza con los comerciantes y los caudillos. Sus dos
ideas-fuerza fundamentales: el centralismo (aun conservando las apariencias
del federalismo) y el nacionalismo, que fueron los temas más críticos del
siglo XIX, pasarían a ser hechos aceptados y a constituir elementos
importantes de la filosofía política del siglo XX en Venezuela. En el
septenio las características ególatras de su personalidad que se agudizan en
el Quinquenio van a deformar y a desviar su labor creadora de gobernante, la
cual también se ve empañada por la forma como dispuso, en provecho personal y
de los suyos, de las ventajas que brindaba el manejo del erario nacional. Sus últimos años transcurrieron en
París, donde murió el 28 de julio de 1899 aún reposan sus restos en el
cementerio cerca de Trocadero. - LEÑA HURTADO, MIGUEL: Historia de
Venezuela 8 Editorial Básica 1 C.A., 2001. INFOGRAFÍAS
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