UNIVERSIDAD YACAMBU
DIRECCIÓN DE ESTUDIOS VIRTUALES
CIENCIA, TECNOLOGÍA Y COMUNICACIÓN
Los avances
tecnológicos han tenido un gran impacto sobre la profesión de Información y Documentación, el efecto ha
sido tan profundo que muchos de los profesionales del sector se están
planteando no sólo cuál es la labor que deben desarrollar, sino también cuál
sería la forma más correcta de denominar la profesión. Puede decirse que casi todas las funciones
tradicionales han sufrido transformaciones y además, han surgido tareas nuevas.
Los documentalistas hoy día son consultores, imparten cursos de formación y
hasta diseñan sistemas informáticos; además, con la aparición de Internet se
han convertido en expertos en búsquedas en la red, en webmasters y hasta en diseñadores de páginas web y de intranets.
Se puede
decir, que las aptitudes y conocimientos que se deben aportar a nuestra
profesión para hacer frente al reto que supone el cambio tecnológico, teniendo
en cuenta que no basta con definir las funciones con simples conocimientos
técnicos o administrativos. Estas nuevas funciones deben de ser entendidas como
un conjunto de actitudes, aptitudes y puntos de vista que pueden ser rápida y
efectivamente aplicados a cualquier nueva oportunidad o necesidad desconocida
que pueda surgir.
Se señalan los
cambios que estas tecnologías introducen en la manera en que se realizan los
procesos organizacionales, de gestión o financieros, las modificaciones que
introducen en los escenarios actuales, que implican cambios en la
gobernabilidad de los procesos, puesto que varían las relaciones entre las
partes y se exige cada vez más una respuesta ágil, un aumento del liderazgo y
un mayor impulso al trabajo en equipos. Se destaca que para que halla un
aprovechamiento adecuado de los medios y procedimientos disponibles tendrán
necesariamente que cambiar los individuos, las organizaciones y los países.
Como parte de este proceso es inevitable que se produzcan cambios imprevistos,
por lo que hay que trabajar conscientemente para que prevalezcan las metas
deseadas.
Existe una
conciencia creciente acerca de la importancia que tienen las tecnologías de la
información y la comunicación como herramientas para el logro de las metas del
desarrollo económico y social. Se ha pasado de una idealización de sus
ventajas, reflejo de su acelerado crecimiento en la década del noventa, a una
aproximación más equilibrada que destaca el papel fundamental de los recursos
humanos en este proceso. Los avances
tecnológicos que se prevén se resumen en: el incremento exponencial del poder
de cómputo, durante 10 o 15 años, la creciente convergencia entre voz y datos
en las comunicaciones, combinada con las mejoras en el ancho de banda durante
las dos próximas décadas; los avances en la traducción que permitirán que en
alrededor de 10 años ésta sea altamente automatizada con calidad aceptable para
un conjunto de aplicaciones y las fuertes uniones entre las tecnologías de la
información y otras tecnologías también revolucionarias como son la de los nuevos
materiales, la bio y la nanotecnología. Las consecuencias de la biorevolución
serán especialmente profundas y muy controvertidas y tendrán lugar con una gran
desigualdad en todo el mundo. Como
resultado del progreso de las tecnologías de la información y la comunicación,
continuará el desarrollo de nuevos productos, específicamente inalámbricos,
ubicuos e interconectados, que llevarán a una vasta integración del mundo real
y el virtual y se desarrollarán numerosos servicios que extenderán el acceso y la
utilidad de los sistemas de información.
Otro aspecto
primordial en la comprensión del impacto que pueden tener las tecnologías de la
información y la comunicación en el desarrollo es el hecho de que se están
produciendo cambios cardinales en la manera en que se realizan los procesos
organizacionales. EL Internet, los nuevos servicios sobre el Web y el empleo
del "Extended Markup Language" (XML), por citar algunos ejemplos,
sustentan una ruptura de las fronteras tradicionales y de los flujos que se
establecen para cumplir diferentes misiones, en la actualidad, observamos como
ya no se piensa solo en una biblioteca como tal, o en un archivo de una empresa
simple, sino que a través de todos estos cambios vemos como han surgido los
centros de documentación o ahora también llamados centro virtuales donde no
solo se posee información bibliográfica, sino también fondos documentales,
acceso a la Internet y una gran variedad comodidades para acceder a cualquier
información todo ello bien llevado en su mayoría por profesionales,
documentalista. Ello supone un reto a la forma de trabajar y a los marcos
reglamentarios y legales en que tendrán lugar los modelos de dirección, gestión
y producción del futuro. A la par de este gran despliegue tecnológico, los
países en desarrollo se encuentran ante la disyuntiva de incorporarse o no a la
denominada Revolución de la Información, pues de no hacerlo se profundizará aún
más la brecha que los separa del mundo desarrollado.
Con
independencia de la definición que se adopte y de las formas de transmisión, ya
sea mediante el habla, la escritura o la lectura; la información comunicada es
el recurso por medio del cual el saber individual se socializa y se vuelve
trascendente.
La capacidad
de la información comprende más que su solo acceso (el cual es un elemento
sobre el que se ha establecido la profesión de los bibliotecarios y
trabajadores de la información); ésta también comprende la conciencia de su
existencia y las habilidades para explotarla una vez adquirida. La sociedad de
la información no será socialmente inclusiva en ningún sentido si no se apunta
al desarrollo de esta capacidad. Un
aspecto fundamental en la preparación de los recursos humanos está en la
incorporación de la gestión de la información y el conocimiento al acervo
individual y al quehacer institucional.
Para
garantizar que el escenario tecnológico futuro no siga siendo una explosión
simplemente comercial, debe hacerse un trabajo sistemático para emplear estos
avances científico-técnicos en los países en vías de desarrollo. Son muchos los
pequeños esfuerzos que se hacen actualmente para introducir las tecnologías de
la información y la comunicación en estos países.
La Revolución
de la Información es un proceso que impacta y es impactado por los valores
sociales y culturales de las sociedades en que tiene lugar reconocidas todas
las ventajas y dificultades que este puede implicar, no puede obviarse que la
actitud que tengan las personas y los grupos sociales es determinante; de nada
vale una biblioteca con acceso a Internet, si las personas no la usan o si la
utilizan con fines diferentes a aquellos para los que se creó.
El proceso de
integración y globalización que tiene lugar con el auge de las tecnologías de
la información y la comunicación constituye una amenaza a la identidad nacional
y a la idiosincrasia de los pueblos; sin embargo, puede ser utilizado con
inteligencia para reflejarlas, fortalecerlas y al mismo tiempo enriquecerlas.
Las tecnologías empleadas convenientemente pueden contribuir al continuo reconocimiento
de la diversidad y a su florecimiento.
Por otra
parte, es muy grande la contribución de los adelantos de la ciencia y la
técnica al desarrollo humano. El progreso de la Electrónica, la Computación y
la Informática, se ha nutrido constantemente de su avance y, a la par de ser
beneficiaria, ha sido un impulso para este.
Las
bibliotecas virtuales son un ejemplo de soluciones que optimizan recursos
materiales y humanos. Éstas no tienen una localización específica sino que son
ubicuas a través de Internet, dada la facilidad que aporta la red de redes a la
navegación de textos, gráficos e hipertextos. Estas bibliotecas proveen
información basada en el conocimiento, que va desde textos y libros de
referencia, en los formatos impresos tradicionales, revistas de artículos
científicos y sus índices, hasta llegar a aquellas con formatos menos
tradicionales entre las que se pueden encontrar guías prácticas, documentación
y bases de datos de cualquier tema. Es
un hecho, el potencial del audio, el video, y las colecciones interactivas de
datos. La biblioteca virtual es móvil, y requiere solamente una computadora
situada convenientemente y disponible a la demanda.
Al igual que
es esencial el conocimiento especializado para asistir a los usuarios en el uso
eficiente de una biblioteca físicamente real, éste también resulta esencial en
el empleo de una biblioteca virtual. Los usuarios potenciales de las
bibliotecas virtuales frecuentemente tienen formación en diferentes disciplinas
y tienen diversas necesidades de información para la toma de decisiones.
INFOGRAFIAS:
http://es.wikipedia.org/wiki/Arquitectura_de_la_informaci%C3%B3n
http://www.lacoctelera.com/documentacion
http://www.monografias.com/trabajos15/profesional-de-informacion/profesional-de-informacion.shtml