En dicho vuelo, el avión se estrelló contra unas montañas cercanas al aeropuerto balear, debido a un descenso mayor al corriente. La comisión de investigación del accidente destacó lo siguiente:
1- El comandante, por una u otra razón, erró en la lectura de los instrumentos.
2- Poco antes del accidente el avión estuvo en posición anormal de vuelo.
3- El comandante mantuvo con Ibiza Aproximación una conversación totalmente personal en valenciano durante más de un minuto. Este factor se consideró importantísimo.
4- Los otros dos pilotos no avisaron al comandante, ni de ninguna anormalidad en los instrumentos ni en su comportamiento anormal.
De estos datos se desprenden dos conclusiones:
1- Existe el llamado Efecto Casandra. Éste se da cuando un copiloto no se atreve a corregir a su comandante por el "temor" a no ser escuchado, o, directamente, no son escuchadas sus recomendaciones.
2- Las comunicaciones son exclusivamente para las comunicaciones de tráfico, hablando con la fraseología establecida y en los idiomas autorizados (inglés, o el idioma oficial de cada país, siempre
y cuando piloto y controlador lo acuerden).
Una última nota para los controladores y pilotos virtuales: Cuando haya que discutir algo, el chat está para ello. La frecuencia hay que dejarla libre para las citadas comunicaciones de tráfico.