JUAN CILVETI, ADIESTRADOR PROFESIONAL DE PERROS DE BECADAS Tlfno: 677 649898

Adiestramiento del perro de muestra

- Primeros contactos del cachorro con la caza.

- Puesta a punto con caza salvaje (BECADA, perdiz y codorniz).

- Perfección de la muestra y del patrón.

- Cobro a la orden en tierra y agua.

- Adecuación del perro al terreno y corrección de la búsqueda.

- Familiarización con los disparos.

- Especialista en adiestramiento para BECADA, Perdiz y Codorniz.

PAMPLONA (NAVARRA)

TLFNO: 677 649898

* Colaborador de la revista “Perros de Caza” ( sobre adiestramiento y caza de la becada y Autor de la sección “Adiestramiento para la Becada” del número especial del año 2002 )
* Guía de Caza de Planeta de Agostini “http://caza.temalia.com”
* Colaborador de caza del Portal de Yahoo.
* Autor de la página web “La caza de la Becada” (www.geocities.com/becada.geo)
* Autorizado para sacar los perros en época de veda.
* Distribuidor Oficial de piensos Ernährung.

El perro de becadas, como el de cualquier otra especie, debe tener un adiestramiento propio para este tipo de caza que, en muchas ocasiones, coincidirá con el de otras modalidades aunque no siendo del todo igual.

Como muchos de vosotros sabréis, me dedico a adiestrar perros de muestra, haciendo hincapié sobre todo en el adiestramiento para la caza de la becada, y también para la caza menor en general (la pluma ). Por ello he pensado en hablar sobre qué es lo que debe tener, en mi opinión, una persona que se quiera dedicar a estas tareas de enseñanza y preparación canina, en concreto para la caza.
En la revista “Perros de Caza”, de la que soy colaborador, suelen preguntar a las personas que están muy introducidas dentro de este mundillo, si creen que el adiestrador tiene que ser cazador. A muchos de vosotros esta pregunta os hará reír, ya que la contestación parece lógica y de sentido común. Pero no os sorprendáis demasiado pues, en la actualidad, aparecen profesionales por todos los sitios ya que creen que esto es un negocio que da mucho dinero, cosa que no es cierta. Para mí, es imprescindible que todo adiestrador sea un verdadero amante de la caza, para que así sepa qué es lo que realmente busca el cazador normal y corriente. Por eso, si yo adiestro es porque me entusiasma la caza y, sobre todo, la labor que en ella desempeña el perro.

VIRTUDES DEL ADIESTRADOR :
Las cualidades más importantes de un adiestrador deben ser, sin ninguna duda, la paciencia, la constancia, la prudencia y la afición, aparte de que además tenga conocimientos. Un perro es un animal y, dependiendo del individuo, tendrá más o menos facilidad para asimilar las enseñanzas. Hay errores que cuestan mucho tiempo corregir y, si intentamos acortar el camino, lo único que conseguimos es echarlo a perder. Hay que acostumbrar al can al adiestramiento y recordarle la lección con una cierta frecuencia, para que no se le olvide. No nos vale de nada hacerle tumbarse a la orden de “puch”, si no lo repetimos durante varios días seguidos hasta que llegue a asimilar perfectamente dicha orden.
El tiempo es más que fundamental. Por lo general, los adiestradores dedican quince o veinte minutos por perro y día pero, en muchos casos, tenemos que meter horas y horas. Es necesario salir al campo al menos tres o cuatro días a la semana. En mi caso, salgo unos seis días semanales y dedico entre una y cuatro horas por perro, aunque en muchas ocasiones los saco en parejas. Creo que una de las cosas más importante es que mis perros están muy en contacto con la caza y durante el tiempo suficiente, ya que en 20 minutos es muy fácil hacer las cosas bien pero, cuando se trata de una jornada entera, no tiene nada que ver. Por otro lado, el perro de caza real tiene que estar acostumbrado a aguantar varias horas en el cazadero y, en muchas ocasiones, sin tener oportunidad de levantar ninguna pieza salvaje.

TERRENO ADECUADO :
Para sacar los perros es imprescindible un terreno lo más apto posible para esta tarea, es decir, en el que podamos dominar al perro y ver cómo trabaja, sin mucho desnivel, con vegetación suficiente pero no excesiva, con bastante espacio, etc. Como todos ya debéis saber, durante la mayor parte del año está terminantemente prohibido soltar los perros en el campo. Por lo tanto,el adiestrador tiene que tener los permisos apropiados para que, de esta manera, no tenga problemas.
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LOS CONOCIMIENTOS :
Mucho cuidado, no se puede enseñar lo que no se sabe. Por eso, para adiestrar, primero hay que tener muchos conocimientos, haberlos aprendido y ser capaces de aplicarlos adecuadamente. En los anuncios y publicaciones normalmente sólo se habla de adiestradores de alta competición. Por lo general son los más conocidos pero, en muchos casos, no son los que nos interesan porque no nos dan lo que buscamos como cazadores. Algunos ofrecen muy buenos resultados para la caza real pero, la gran mayoría, sólo dedican su tiempo al adiestramiento para las modalidades de competición ( caza práctica, primavera y gran búsqueda ), lo cual es, por otra parte, comprensible.

Personalmente, estoy encantado con mi labor de adiestramiento, de momento le dedico todo mi tiempo, me encantan los perros de caza, dispongo de terrenos con autorización para sacarlos, he obtenido muy buenos resultados hasta ahora, y en realidad siempre estoy ocupado con perros que me encargan para adiestrarlos. Se trata de mi gran hobby personal al que dedico mi tiempo porque es lo que más me gusta. Por eso creo que la afición es indispensable y vital para un adiestrador que se precie.

A VUESTRA DISPOSICIÓN :
Para sacar lo mejor del perro, sea de la raza que sea, hay que enseñarle y entrenarle. Por tanto, quien no disponga de conocimientos o del tiempo suficiente para enseñar a sus cachorros o perros a cazar, no podrá luego quejarse ni echarles en cara que no le cacen como él quisiera, ya que no ha puesto nada de su parte para lograrlo. Para evitar estas sorpresas y disgustos, estamos los adiestradores que ponemos toda nuestra dedicación con el fin de conseguir de esos perros grandes cazadores. Para todo ello, os recuerdo que estoy a vuestra total disposición.

Todo amante de los perros de muestra sabe lo importante que es la parada ante la presa, sin la cual nos sería muy difícil abatir las codornices, becadas o cualquier otra pieza de caza. Esta cualidad es hereditaria y la lleva el can dentro de si, es decir, no lo tiene que aprender. Un pastor alemán nunca sabrá mostrar una perdiz como un pointer, ya que no lo lleva dentro.
Primeros días adiestrando con "Derby".

Nosotros, los cazadores y adiestradores, tenemos la función de sacar el instinto de muestra que cada perro lleva consigo. Cada individuo tiene diferente dificultad para mostrar, por eso hay setters que con un par de meses ya nos ponen las codornices perfectamente y a otros, por el contrario, les cuesta mucho más.

LOS PRIMEROS ENTRENAMIENTOS :
Desde temprana edad, es bueno poner al joven cachorro en contacto con caza. Lo más fácil es soltarle alguna codorniz para ver si tiene un buen instinto de muestra. Algunos prefieren hacerle la “mariposa”, que consiste en atar una pieza muerta al extremo de una cuerda y moverla para que el perrito la siga, dejándola quieta de vez en cuando, para que la pare.
Para los seis o siete meses, seguramente empiece ya a hacer las primeras muestras. La firmeza de éstas dependerá, en parte, del propio adiestramiento. Si utilizamos caza salvaje, la muestra será más tensa y expresiva que si le soltamos siempre codornices de granja, es más que lógico. A su vez, según la especie de que se trate, le motivará más o menos. Para los principiantes, lo mejor son las africanas. Con el tiempo podemos pasar a las perdices o becadas, pero cuando ya realice auténticas faenas con las codornices.
Si lo que queremos es que muestre a buena distancia,es conveniente sujetarlo con una corréa o levantarlo y llevarlo más atrás. Si repetimos este acto varias veces, casi seguro que terminará parando a varios metros. De todos modos, el olfato y el clima son también muy importantes ya que un perro con poca nariz no puede notar a una patirroja a cincuenta metros.

EL PATRÓN Y LA GUÍA :
Muchos de vosotros cazaréis con varios canes a la vez, por lo que el patrón os será de gran importancia ya que no queréis que se molesten entre ellos. Por lo general, aprenden a patronear ellos solos pero, si no es así, tendremos que obligarles a respetarse unos a otros sujetándolos nosotros mismos.
La guía es una función primordial en todo becadero o perdicero. Por lo general, según adquiere experiencia, aprenderá a guiar con suma facilidad. Algunos están mucho más capacitados que otros y, desde luego, cada uno tiene su estilo. Esto es, en su mayor parte, cuestión de práctica.

RAZAS Y ESTILOS:
No debemos dejar a un lado al estilo que tanto caracteriza a cada raza. Las posturas propias de cada perro son las que lo hacen diferente del resto. Un setter inglés que muestra de pie sin ningún tipo de expresión, no es un buen perro. En ocasiones, se puede corregir utilizando exclusivamente caza salvaje u obligándole a ponerse en una postura concreta. Por ejemplo, cuando adiestro a un joven setter y se queda parado, le hago flexionarse. Repitiéndolo varias veces, al final lo hará del todo y por sí solo. Cada línea es más propensa a un estilo propio, de ahí que no todos los pointer o bracos cacen igual.
Permitidme un consejo que nunca me cansaré de repetiros, que no disparéis jamás sobre una pieza que no haya sido previamente mostrada por el joven can. Con el tiempo, nos daremos cuenta de sus buenos resultados.

ADIESTRAMIENTO DEL PERRO PARA LA CAZA DE LA BECADA


Si hay algo que me agrade, es el adiestramiento del perro de muestra para la caza de la becada, a lo que dedico casi todo mi tiempo. Nuestras especies cinegéticas autóctonas de caza menor, es decir, perdiz, conejo o liebre, están experimentando un gran descenso en el número de individuos, lo que ha llevado a una buena parte de los cazadores españoles a dedicarse a la sorda. Cada vez hay más aficionados a esta modalidad, caracterizada por las espectaculares faenas de nuestros perros, quienes ocupan el papel de verdaderos protagonistas. Sin un buen perro becadero no se puede disfrutar ni conseguir buenas perchas. Un animal superdotado para estas faenas no tiene precio ya que es muy difícil de conseguir. Podemos tener perros que muestren las chochas con suma facilidad y batan mucho terreno, pero que carezcan de ese don tan especial que caracteriza a los super becaderos. De manera que uno de estos animales puede llegar a costar un precio muy elevado, que sólo unos pocos están dispuestos a pagar.

Su origen y cualidades :
Lo primero que tenemos que hacer para conseguir un fuera de serie es adquirir un perro de buenos orígenes. Tenemos que concienciarnos de que en el mundo del perro no existen milagros por lo que, de un perro procedente de padres sin ningún tipo de interés hacia la caza, es imposible conseguir un animal con cualidades extraordinarias. Al igual que un Ferrari, un setter hijo de un gran campeón, tiene un alto coste. Aunque la raza es una cuestión de gustos, por lo general se suele utilizar el setter inglés. Pero, cuidado, he conocido individuos de otras razas que no tenían nada que envidiar a los setters.
Hay personas que, cuando compran un cachorrillo con una gran genealogía, creen que van a tener con toda seguridad un compañero de caza increíble, vamos, un fuera de serie. Pero, ojo, que en muchas ocasiones se llevan una gran desilusión y hasta piensan que les han timado. En la mayoría de los casos somos nosotros mismos, los cazadores, quienes echamos a perder los perros ya que no sabemos enseñarles a cazar. El adiestramiento es algo básico para esta modalidad de caza.
En mi opinión, las cualidades más importantes en un becadero son la afición, la nariz y la muestra. Hay otras que también debe reunir un buen perro, aunque son de menor importancia. Sin afición no buscará la caza, será como sacarlo a pasear. El perro con afición bate mucho terreno y se deja la vida en el cazadero. Cuanto más espacio cubra, tendremos mayor posibilidad de encontrar las becadas. La nariz es esencial ya que es el sentido que utiliza para localizar las piezas. Hay perros que detectan con facilidad un conejo, pero tienen dificultad para notar la presencia de la dama del bosque. Un perro con buenos vientos realizará muestras a distancias considerables, por lo que es más difícil que la sorda se eche a volar. Una muestra firme hará posible que lleguemos a colocarnos convenientemente para poder disparar. La guía es otro factor de gran importancia que el perro irá mejorando con el paso del tiempo y nos ayudará con esas becadas de finales de enero que se esconden en la maleza y se resisten a levantar el vuelo.

Afición a los perros :
Cada perro es diferente, no tiene nada que ver con resto aunque sean de la misma raza o incluso camada. Por eso no podemos exigir lo mismo a dos cachorros. Nos tenemos que fijar en sus defectos y virtudes para poder modelarlos a nuestro gusto. Debemos ser capaces de sacar a relucir todas aquellas cualidades que lleva dentro. A través del adiestramiento conseguiremos corregir todos aquellos defectos que consideremos inapropiados, aunque esto no siempre es posible. El adiestramiento es un arte. El buen adiestrador deja su huella, se hace notar, y al final consigue resultados. El mismo perro, en diferentes manos, cambia por completo. Hay personas que tienen un don especial para sacar a relucir las virtudes de nuestros fieles amigos. Para mí, lo más importante es tener verdadera afición por los perros, ser un apasionado por la caza y armarse de mucha paciencia y constancia.
Si queremos un buen cachorro, aconsejo que la madre o alguno de los abuelos sean cazadores de becadas. Ya tenemos la materia prima, ahora tenemos que pulirla para conseguir aquello que tanto deseamos: un perro becadero de excepción. Sobre este tema, os podría aconsejar posibles criadores de prestigio que han demostrado obtener magníficos resultados.
Desde cachorros :
La educación de un perro de muestra debe empezar en el mismo momento de su adquisición, no hay que esperar hasta que tenga un año de edad pues, como llevo viéndolo en muchas ocasiones, será más difícil dominar al perro. Los adiestradores profesionales recomiendan que tengan un año y medio para entregárselo, pero el verdadero motivo es que así pueden comprobar todas las cualidades que, para esa edad, ya puede tener el perro. Lo primero que hay que conseguir es que se sociabilice, hay que pasar tiempo con el cachorro para que no salga asustadizo o esquivo. Algunos perros dejan de cazar cuando notan la presencia de otras personas, o hasta el ruido de un coche. Así se explica que cada vez se ven más cazadores en el monte tras las esquivas sordas que, con un animal como estos, se van a llevar muchas desilusiones. Este problema suele ser culpa nuestra por no acostumbrarlo desde pequeño, o incluso por haberle llegado a pegar sin ningún tipo de razón. Pero también adelanto que, en ocasiones, nuestro amigo no es un perro equilibrado y por tanto no se deberá utilizar para la reproducción.
Cuando el cachorro tiene entre tres y cuatro meses, podemos usar la famosa mariposa, una pieza de caza muerta atada a un hilo que la movemos de un lado a otro para que el perro la siga y, de vez en cuando, la dejamos en el suelo para ver si el cachorro se queda de muestra. Es bueno hacerlo hasta conseguir que se pare y, en caso de que sea demasiado terco, sujetarlo nosotros mismos. Ya veréis cómo en unas pocas sesiones lo hace perfecto. Con cuatro o cinco sesiones es más que suficiente. En ocasiones, algunos cachorros no muestran ningún interés con este tipo de adiestramiento, en tal caso no os preocupéis y dejad de hacerlo pero, si no queréis cesar en el intento, utilizar una pieza viva o acompañarlo de otro perro para que los celos le inciten a seguirla.

El cobro :
El juego de la pelota da unos resultados increíbles en el cobro y además aprovechamos para divertirnos un poco. Sin más, tenemos que tirar un objeto al perro para que nos lo traiga. En caso de que se niegue a traérnoslo, lo ataremos con una correa larga y le obligaremos a venir hasta nosotros. Cuando cobre la pelota a la perfección, podemos pasar a usar la caza real. Al principio será congelada para que no se la coma ya que, al estar dura, no la podrá tragar. Hay que dejar al perro con la pieza en la boca durante un buen rato para que disfrute del momento y no asocie el acercarse a nosotros con la perdida de su preciado tesoro, el ave de caza. En conversaciones con cazadores conocidos, algunos me comentan que el cobro de las becadas no es de gran importancia ya que suelen caer muertas o, en todo caso, revolotean en el mismo lugar en el que han caído. Esto no es del todo cierto, ya que en muchas ocasiones he visto apeonar a muchas sordas heridas, aparte de que la frondosidad de la vegetación hace difícil encontrar a simple vista a las chochas. Por suerte, el cobro se puede mejorar en todos los perros ya que no es necesario que tengan una gran instinto. En ocasiones, la pieza puede caer en el río o lugares pantanosos y por este motivo debemos acostumbrar a nuestro perro a meterse en el agua. Para ello le podemos echar una codorniz herida en un lugar con poca profundidad y, poco a poco, iremos aumentando la dificultad. Otra manera muy efectiva es meternos nosotros dentro de agua para animarle a entrar, por supuesto en verano para no congelarnos.

Como suelen decir los grandes becaderos, el perro necesita salir mucho al monte para ser un gran campeón. En ocasiones tenemos la duda de cuál es la edad perfecta para sacar a los cachorros al campo. En mi caso, suelo ir con ellos desde los tres meses para que vayan viendo los pájaros y se fijen en la naturaleza. Esta claro que el tiempo del paseo hay que adecuarlo a la capacidad de nuestro fiel amigo ya que no podemos dar una vuelta de varias horas con un cahorrillo de tan sólo tres meses de edad. Con siete u ocho meses, ya está físicamente capacitado para aguantar una jornada de caza o una mañana en el monte. De todos modos, tampoco es bueno ir varios días seguidos ya que se encuentra en edad de crecimiento. Con un año ya es adulto y puede aguantar todo lo que le echemos.

Caza salvaje :
A veces, nos surge la duda de si debemos usar especies de granja para el adiestramiento del perro de becadas. Hay una fuerte crítica hacia el uso de este tipo de aves, pero en ocasiones es necesario ayudarse de ellas en determinadas labores. Es sabido por todos que como la caza salvaje no hay ninguna, así que los que tengáis la suerte de poder sacar al perro con caza silvestre durante todo el año, no dudéis en hacerlo. Cuando el perro tiene cinco o seis meses, le podemos echar unas codornices o perdices pero, cuidado, siempre y cuando vuelen bien ya que, de lo contrario, las capturarían y perderían el instinto de muestra. Podemos coger a nuestro amigo cuando está parado e irlo retirando hacia atrás para que se acostumbre a mostrar a distancia. Lo sujetamos con una correa para que no se acerque y haga la guía a la orden. El abuso en el uso de caza sembrada perjudica la muestra del perro. De manera que, como mucho, la usaremos en cuatro o cinco ocasiones, las menos posible, y sólo en alguna más cuando tengamos que quitar defectos al cachorro. Los lugares en los que soltemos las piezas tienen que tener suficiente vegetación cómo para que se cubra la perdiz o la codorniz y, a ser posible, con un pequeño desnivel para que realicen un vuelo largo y nuestro compañero de fatigas no sea capaz de alcanzarlas.

La media veda nos será de gran ayuda para mejorar la muestra de nuestros cachorros y acostumbrarlos a hacer el patrón, tan importante para aquellos que cazamos las arcéas con más de un perro a la vez. Sólo dispararemos a las codornices que nos hayan mostrado perfectamente y, si no las paran, les reprenderemos repitiendo siempre la misma palabra, ¡no!. Por suerte, las africanas son bastante abundantes por lo que, casi con toda seguridad, nuestros amigos terminarán mostrándolas sin ningún tipo de dificultad. Nunca tendremos que hacer que el perro entre, es decir, que se lance a por la presa, ya que se acostumbrará a romper la muestra y cuando lo saquemos a por las becadas las levantará sin que podamos dispararles. De modo que seremos nosotros mismos quienes asustaremos las codornices y si lo hace el perro nunca la abatiremos.

El Beeper:

El uso del collar de becadas está de moda y no por mero capricho. Los perros becaderos cada vez cubren más terreno, son auténticas máquinas de correr. Me encanta ver a mis perros cómo, en medio de rápidas carreras, se abalanzan al suelo para quedarse, inmóviles, tumbados de muestra, son momentos inolvidables. Esto hace que, en muchas ocasiones, sea imposible la localización y el seguimiento de nuestros perros en el monte con el simple uso del cencerro o campanilla. El collar de pitido, el beeper, se puede escuchar a muchos metros de distancia, lo que nos evita muchos problemas. Los perros jóvenes, con mucha afición, suelen tender a correr entre los árboles y la vegetación alejándose a grandes distancias, pero luego no saben volver porque todavía no se orientan. ¿ A quién no le ha sucedido esto? , desde luego a mi, siempre que salgo con un cachorro, y los collares me ayudan a encontrarlo. Aunque algunos perros se asustan de su sonido, tenemos que acostumbrarlos. Las soluciones son numerosas y muy sencillas. Una de ellas es sacarles al monte con el collar hasta que se den cuenta de que no les sucede nada anormal, o ponérselo cada vez que les llevamos a cazar o les damos de comer para que asocien su sonido con la diversión. Con el tiempo aprenderán que, cuando el sonido es continuado, es que otro perro está de muestra, por lo que acudirán rápidamente. Así, el collar nos será de gran utilidad para los jóvenes. Si cazamos con varios a la vez nos dan la posibilidad de emitir diferentes tipos de sonido para diferenciarlos. En este caso primero tendremos que trabajar la muestra de cada perro por separado y luego juntarlos para que se hagan el patrón ya que de lo contrario por envidia no se pararían.

JUAN CILVETI BAYONA: Adiestrador de perros de muestra

PAMPLONA (NAVARRA) Tlfno: 677 64 98 98.

- Primeros contactos del cachorro con la caza.

- Puesta a punto con caza salvaje.

- Perfección de la muestra y del patrón.

- Cobro a la orden en tierra y agua.

- Adecuación del perro al terreno y corrección de la búsqueda.

- Familiarización con los disparos.

- Especialista en adiestramiento para BECADA, Perdiz y Codorniz.

* Colaborador de la revista “Perros de Caza” ( sobre adiestramiento y caza de la becada y Autor de la sección “Adiestramiento para la Becada” del número especial del año 2002 )
* Guía de Caza de Planeta de Agostini “http://caza.temalia.com”
* Colaborador de caza del Portal de Yahoo.
* Autor de la página web “La caza de la Becada” (www.geocities.com/becada.geo)
* Autorizado para sacar los perros en época de veda.
* Distribuidor Oficial de piensos Ernährung.

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