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La Nueva Humanidad


CLARIDAD DE IDEAS


 

Que duda cabe que para realizar cualquier cosa en esta sociedad primero hemos de tener claro qué es lo que queremos hacer y de qué manera lo vamos a realizar. A nivel espiritual, además de saber qué tenemos que hacer y cómo, debemos de plantearnos si realmente lo queremos llevar a cabo, si de verdad estamos convencidos que el camino que nos hemos trazado es el más indicado para nuestra evolución personal.

 

Muchas son las imperfecciones que, por desgracia, poseemos y ellas son las causantes, junto con nuestra actitud, de que nos encontremos en la situación que hoy por hoy nos encontramos. Si en las diversas oportunidades que nuestro Padre nos ha ido otorgando nos hubiéramos preocupado un poco más de trabajar nuestro interior, a buen seguro que en el día de hoy no estaríamos en este planeta luchando por conseguir limpiar nuestro espíritu para poder entrar a formar parte de una nueva humanidad que está llamada al amor, a la paz, a la caridad y a todo aquello cuanto aquí, en este plano espiritual en el cual nos hallamos, carecemos.

 

Por eso es conveniente, para nuestro buen funcionamiento, que reflexionáramos un poco más sobre nuestro estado actual; es importante que analicemos nuestro interior y pongamos en orden todas nuestras ideas para poder afrontar esta batalla final contra las imperfecciones en un buen momento de forma.

 

Todos sabemos que el movimiento que en estos momentos existe de espíritus del bajo astral no es debido a ninguna casualidad, sino que ellos se dan cuenta del riesgo que están corriendo con la llegada de la nueva humanidad y se resisten a ser expulsados de este planeta y, por ello, están intentando con todos los medios que tienen a su alcance probarnos para que saquemos nuestros defectos a la luz y hacerlos más grandes de lo que son para que puedan vencernos y atentar contra la obra de Dios. Estos hermanos no están esperando otra cosa sino que nos descuidemos un poco para poder entrar en nuestra vida e influirnos de una manera negativa para impedir que sigamos nuestro ritmo de evolución.

 

Todo esto les resultará inútil si nuestras ideas las conservamos fuertes y claras y nuestros corazones limpios y dispuestos a luchar para dominar nuestros defectos, si además estamos deseosos de la llegada de la nueva sociedad en donde podremos seguir nuestra trayectoria ascendente hasta el Padre de una manera más fácil y llevadera pues en el siguiente escalón de la evolución la gran mayoría de las imperfecciones humanas desaparecerán por completo. Esto no indica que dejemos de poseer defectos sino que aquellos que teníamos más arraigados en nuestro espíritu los habremos eliminado, con lo que nos quedarán por quitar restos de otros defectos que en este nuevo plano, con nuestra predisposición y la ayuda de los hermanos que nos rodean, nos resultarán mucho más sencillos de eliminar.

 

En los momentos en los que nos encontramos no podemos dudar, pues ello implica pararnos y correr el riesgo de ser atrapados por el bajo astral. Tenemos que conseguir mantener un equilibrio en nuestro interior que nos permita ver en todo momento, con claridad precisa, todas y cada una de las situaciones que se nos presenten en nuestra vida para de esta forma poder afrontarlas con garantías de éxito.

 

Para llevar hasta buen puerto nuestros fines no pensemos que estamos solos, pues estamos rodeados de infinidad de hermanos espirituales dispuestos a ayudarnos en cuanto se lo pidamos de corazón, además de todas aquellas personas que conviven con nosotros diariamente así como todos los amigos de los cuales nos rodeamos para poder compartir todas nuestras experiencias. Todo este conjunto permite obtener unos resultados óptimos si nosotros ponemos de nuestra parte.

 

Tal y como está hoy en día el panorama internacional nos va indicando que el cambio de ciclo tan anunciado ya ha comenzado y por consiguiente no podemos permitirnos el lujo de perder ni un minuto con cabezonerías personales, pues el día de mañana ese minuto nos puede hacer mucha falta y, aunque no lo creamos, puede ser el causante de nuestra no inclusión en la sociedad tan ansiada por todos nosotros.

 

Por lo tanto, reflexionemos seriamente y pongamos todas nuestras ideas en concordancia con nuestros sentimientos, para seguir en esta maravillosa vida espiritual. Hemos de saber aprovechar todas estas oportunidades que nuestro Padre nos está brindando para que el día de mañana se lo podamos pagar ayudando a otros hermanos a que puedan pasar esta misma situación.

A.L.S.S.